Nuestro Fundador

Padre José Kentenich

La vinculación con nuestro Fundador, el Padre José Kentenich, ha distinguido a nuestra comunidad en cada período de su historia. El Padre Kentenich, dotado de una misión única para nuestro tiempo, nos transmitió las riquezas de su carisma, así como lo dijera San Juan Pablo II:

“Por su naturaleza, los carismas son comunicativos y dan lugar a esa ‘afinidad espiritual entre las personas’ y a esa amistad en Cristo que es el origen de los ‘movimientos’. El paso del carisma original al movimiento ocurre a través de la misteriosa atracción que el fundador ejerce sobre todos aquellos que se involucran en su experiencia espiritual. De esta manera los movimientos reconocidos oficialmente por la autoridad eclesiástica se ofrecen como formas de autorrealización y como reflejo de la única Iglesia”.

(San Juan Pablo II, Pentecostés, 1998 a los Movimientos Eclesiales)

La vida de nuestro Fundador

El Padre Kentenich nació en Gymnich, cerca de Colonia, Alemania, el 16 de noviembre de 1885. La Divina Providencia mostraría claramente que este pequeño niño estaba destinado para una misión extraordinaria.

Consagración a María

Cuando tenía ocho años, su madre tomó la difícil decisión de llevarlo al orfanato de San Vicente en Oberhausen, Alemania. Ella sentía que ya no era capaz de proporcionar a su hijo los cuidados necesarios. En su angustia, rezó con su hijo ante una estatua de la Virgen María en la capilla del orfanato. Fue un momento de gracia para José, en el que pudo percibir el amor tan grande de su Madre Celestial que nunca lo dejaría solo. En ese mismo momento, Él le consagró conscientemente a María su corazón. A partir de entonces, el amor entre él y la Santísima Virgen se convirtió en el secreto de su vida y su fuente de fortaleza espiritual. Él mismo diría muchos años después: “Ella me formó y educó personalmente desde el noveno año de mi vida”.

Vocación al sacerdocio

A los doce años, en el día de su primera comunión, José Kentenich le confió a su madre que quería ser sacerdote. A los catorce años, José se inscribió en la Escuela Superior de la Sociedad de los Palotinos en Ehrenbreitstein, Alemania, donde se preparó para sus estudios en Teología y para su noviciado en la comunidad.  El 8 de julio de 1910, José Kentenich fue ordenado sacerdote.

Padre y educador

El joven Padre Kentenich comenzó su vida sacerdotal como un talentoso maestro y educador en la Casa de Estudios de los Palotinos en Schoenstatt, Vallendar. Un extraordinario vínculo de confianza se desarrolló entre él y sus estudiantes. Los jóvenes hicieron suyo su amor por María y, a guiados por él, aprendieron a verla como el puente que conduce a un profundo y ferviente amor a Dios.

Fue junto con estos estudiantes que el Padre Kentenich selló la Alianza de Amor original con María, un 18 de octubre de 1914. El cual hoy es conocido el día de fundación de Schoenstatt. Más tarde, el Padre Kentenich fundó la comunidad de las Hermanas de María de Schoenstatt el 1 de octubre de 1926.

Entre los años 1920 y 1930, el Padre Kentenich ofreció retiros a miles de sacerdotes de las diócesis de Alemania. Además, dio conferencias pedagógicas para educadores y párrocos e innumerables charlas para los miembros del joven Movimiento de Schoenstatt.

Prisionero de los Nazis

Cuando el Nazismo llegó al poder en Alemania, sus dirigentes se dieron cuenta de la profunda influencia religiosa y educativa del Padre Kentenich y del Movimiento de Schoenstatt. Por esto, en 1941, nuestro Fundador fue encarcelado y más tarde transportado al campo de concentración de Dachau. Allí, pudo ser fuente de consuelo, alegría y esperanza para sus compañeros. Aun en el «infierno de Dachau» trabajó con incansable celo apostólico, fortaleciendo la fe de los que lo rodeaban y, al mismo tiempo, construyendo secretamente la Obra de Schoenstatt a través de sus escritos y su continua dirección. Incluso llegó a fundar las comunidades de la Obra Familiar y de los Hermanos de María. En 1945, el Padre Kentenich regresó a Schoenstatt, ileso en cuerpo y alma.

Viajes por el mundo

Después de ser liberado de Dachau, el Padre Kentenich emprendió viajes por todo el mundo para visitar los lugares a los cuales, entretanto, había llegado Schoenstatt – en Sudáfrica y Sudamérica. Además, exploró los Estados Unidos buscando puertas abiertas a la posibilidad de establecer el Movimiento también allí.

Exilio

A medida que el Padre Kentenich intensificaba sus esfuerzos por la aprobación de Schoenstatt y sus varias comunidades por parte de la Iglesia, se hizo evidente que tenía una nueva forma de pensar y educar, la cual fue poco comprendida y aceptada por ciertas autoridades de la Iglesia. Esto lo llevó a ser exiliado fuera de Schoenstatt por catorce años. Por lo tanto, a partir de 1951 vivió en Milwaukee, Wisconsin, Estados Unidos, mientras que las autoridades de la Iglesia examinaban más de cerca a Schoenstatt y su carisma.

El 22 de octubre de 1965, la Iglesia puso fin oficialmente al exilio del Padre Kentenich, restaurándole en su posición de Padre y Fundador de la Obra de Schoenstatt. El Papa Pablo VI dio a Schoenstatt su bendición apostólica el 22 de diciembre de 1965. En esa ocasión, el Padre Kentenich le prometió que Schoenstatt ayudaría a llevar a cabo la misión de la Iglesia de acuerdo al Concilio Vaticano II. Nuestro Fundador pasó los últimos tres años de su vida en el Monte Schoenstatt, en Alemania, fortaleciendo y consolidando a la Familia de Schoenstatt.

Regreso al Hogar Eterno

El 15 de septiembre de 1968, en la fiesta de Nuestra Señora de los Dolores e inmediatamente después de celebrar la Santa Misa, el Padre Kentenich fue llamado a la casa del Padre Celestial. A petición suya, las palabras Dilexit Ecclesiam (Amó a la Iglesia) fueron inscritas en su tumba.

Causa de santidad

El proceso de beatificación del Padre Kentenich está en marcha en la diócesis de Tréveris, en Alemania. Muchos han experimentado su intercesión y se dirigen a él como padre espiritual, guía y compañero de vida. Si le gustaría obtener más información, o desea informarnos sobre haber recibido una respuesta a sus oraciones por la intercesión del Padre Kentenich, por favor contáctenos a alguna de las siguientes direcciones:

ESTADOS UNIDOS:
Father Joseph Kentenich Secretariat
W284 N404 Cherry Lane
Waukesha, WI 53188
262-522-4300
JKsecretariat@schsrsmary.org

PUERTO RICO:
Secretariado P. José Kentenich
PO Box 744
Cabo Rojo, PR 00623
787-851-5368

MÉXICO:
Secretariado P. José Kentenich
Apartado Postal No. 5
Villa del Pueblito C.P. 76900
Corregidora, Querétaro
442-228-1220
secretariadopjkmexico@gmail.com
Instagram: @s.pjk.mx
Facebook: Secretariado P. José Kentenich México

REPÚBLICA DOMINICANA:
Secretariado P. José Kentenich
Villa Schoenstatt
La Victoria, Santo Domingo Norte
809-222-8006
santuariovictoriapatrisrd@gmail.com

O, visite el sitio web internacional del Secretariado Padre Kentenich:

“El Padre Kentenich fue una de esas personas bendecidas por la mano amorosa de Dios cuya visión de las verdades reveladas le permitió ser un gigante entre sus contemporáneos. No sólo su propia vida de perfección espiritual fue ejemplar, sino que supo también cómo inspirar a otros a seguir sus pasos en la imitación de las buenas obras que estaba realizando. Verdaderamente estaba adelantado a su tiempo, como sucede a menudo con aquellos que están particularmente dotados por Dios para un propósito especial aquí en la tierra”.

Pio Cardenal Laghi

Esta información está tomada de: Anhelos de vida: Novena para jóvenes (Secretariado Padre Kentenich)